Se puede engañar a todos poco tiempo, se puede engañar a algunos todo el tiempo, pero no se puede engañar a todos todo el tiempo.

Abraham Lincoln

lunes, 18 de enero de 2010

Jaca olímpica

Tenía previsto escribir sobre este tema, hacer memoria de los años y años que se presentan frustradas candidaturas, inútiles, que no se creen ni los que las presentan. Tenía previsto hablar de como ese humo lo había hecho suyo el señor Belloch y a rebufo el sr. Elboj. Tenía previsto hablar de como Barcelona recorre un camino sin retorno de grandes eventos a costa del dinero de todos para beneficio de unos pocos (los de siempre) pero el blog Uno de Huesca ha copiado y pegado otra columna magnífica de Trasobares que dice mejor que yo todo lo que se puede decir sobre este asunto.

Y como creo en el copy left y me parece opinión muy interesante hago lo mismo con esa advertencia previa de que el mérito no es mío.

Lo de disputarle a Barcelona la organización de los Juegos Olímpicos de invierno del 2022 nos ha de sumergir en otra faceta esperpéntica de la pugna con Cataluña. Por si no teníamos bastante con la lengua vernácula de la Franja oriental y con los bienes eclesiásticos sustraídos de allí por el obispado ilerdense, ahora nos vamos a enredar con el olimpismo. A ver quién puede más. Y a gastar con alegría la pasta del común, oigan, que debe sobrar. Aragón ya ha fundido un buen paquete de millones en sucesivas candidaturas que quedaron en nada. Suma y sigue. Además, si ahora están en el ajo los vecinos del Este intentando quitarnos el juguete, el asunto tiene que ver con el honor patrio. Casi nada.

¿Interesa tanto hacer una Olimpiada invernal? Según se mire. Hay países como Suiza que han decidido pasar del tema. Pero es que los suizos son muy suyos haciendo cuentas, mientras que aquí somos infinitamente más generosos (con el dinero de todos).

Vean, si no, a nuestro vicepresidente Biel, tan ocurrente y dicharachero siempre. El otro día se enteró de que los dos aeropuertos aragoneses (Zaragoza y Huesca) acumulan doscientos millones en pérdidas y de inmediato pidió su transferencia a la DGA. Le brillaban los ojos al prócer ante la posibilidad de sumar esas dos joyas a su colección de iniciativas institucionales seriamente deficitarias. Doscientos millones en números rojos antes de empezar a meter la mano es un bocado demasiado tentador. Si sumamos tal bicoca a los otros negocios públicos ya en marcha (desde Aragón TV a Aramón, pasando por Motorland, el aeródromo de Caudé, el futuro campo de fútbol de Zaragoza y otras maravillas) podemos asegurarnos un agujero antológico. Los aeropuertos, los Juegos Olímpicos (¡se van a enterar esos catalanes!), cualquier sucedáneo de la Fórmula 1... todo vale. Lo malo es que aquellos listos de ILD, los de Gran Scala, se están rajando, los muy gallinas. ¡Con las posibilidades que ofrecía el proyecto a la hora de enterrar euros sin conocimiento!

5 comentarios:

Miguel dijo...

¿Recuerdas al Elboj diciendo que en el planteamiento global de la candidatura Huesca tendría el hielo?. Pues Belloc ya ha dejado calro que también eso en Zaragoza.Mejor para Huesca.
¿Pero cuando nos olvidaremos de estos despropósitos?

Anónimo dijo...

Venga, a ver si en izquierda unida de Aragón tienen huevos y piden el cierre de los dos aeropuertos.

Espartaco dijo...

No tengo ni idea de lo que piensa la Izquierda Unida de Aragón sobre los aeropuertos, lo juro. Y sería fácil enterarme (supongo), tan fácil como mirar su postura navegando en google (como he hecho otras veces), pero me mucho me temo, estimado anónimo que has cogido el rábano por las hojas, que no has leído bien el artículo de Trasobares o incluso me atrevería a decir que no lo has entendido.

Por mi parte, en lo que respecta al de Monflorite, que es del que tengo más datos, mañana mismo. Y una vez cerrado que vuelva la Escuela de vuelo sin motor, que movía más gente. Y que se queden los chinos, pero sin más gasto del que genera un aeropuerto comercial.

Anónimo dijo...

Buenas, soy "el tocapelotas",
artículo de hoy de F. Savater sobre el pirateo en la red y sus defensores:
Mecenas murió ocho años antes del comienzo de la era cristiana (tras perder el favor de Augusto y de introducir en Roma las piscinas de agua caliente, otra demostración de buen gusto), pero el mecenazgo continuó a lo largo de los siglos. Pintores, escultores y literatos tuvieron que buscar el amparo de los reyes, de la Iglesia, de la nobleza con ansias de grandeza o de simples burgueses enriquecidos. En cualquier caso, vivían dependiendo de los caprichos e intemperancias de quienes financiaban sus obras y su misma subsistencia. Produjeron logros sublimes, desde luego, pero nunca dejaron de saberse -hay testimonios abundantes de ello, algunos amargos- empleados en el mejor de los casos y criados distinguidos en el peor. Así fue hasta que socialmente nació un público que apreciara y retribuyera su trabajo, independizándoles al menos en parte de las directrices ideológicas impuestas y de la interesada tutela de los poderosos.

Ahora parece que gracias al "gratis total" facilitado por Internet vamos a volver al antiguo régimen. Desde luego los mecenas de mañana serán distintos, más corporativos y multinacionales, pero volverán a reservarse la exclusiva de los artistas empujados a su protección por la necesidad. Y no lo duden, también impondrán sus condiciones a los productos que van a financiar. ¡Otra retroconquista! Un adagio latino decía que si los tontos volasen, oscurecerían la luz del sol. Para comprobar su actualidad, basta con pasearse por ciertos sitios de la Red... Por no hablar, claro, de Rodríguez Ibarra.

Espartaco dijo...

Sin tener nada que ver con la entrada he de decir que la reflexión de Savater me deja apenado, pero que muy apenado. Por culpa del gratis total las artes volverán al antiguo régimen. Es triste pensar que ya no tendremos pintores el corte de Dalí como consecuencia del pirateo en internet, o de escultores como Botero por la misma causa, por no hablar de arquitectos como Moneo que quedarán en manos de los "burgueses enriquecidos" y no podrán destinar su arte a las masas proletarias. Es terrible lo que me cuenta, oiga.
Por no hablar de otros artes como la danza, la ópera, todo tipo de música en vivo o incluso aquellas artes tan cuestionadas respecto a su misma naturaleza como la tauromaquia.

Sí, es cierto, ahora todas las artes, como consecuencia del gratis total de Internet, se verán en manos de esos terribles mecenas y ya no disfrutarán de las bondades democráticas de las grandes cadenas de producción musical o cinematográficas, populares ellas, que duda cabe, y que para nada responden a clichés estereotipados de miras exclusivamente empresariales. Esto de la Internete, oiga, acabará con el floklore, con los grupos que en todos los pueblos tocan y cantan jotas, con la artesanía, con la fotografía y con todo tipo de creadores...

Tendré que acabar dando la razón a tan insigne filósofo, el sr. Sabater: "si los tontos volasen, oscurecerían la luz del sol"