Se puede engañar a todos poco tiempo, se puede engañar a algunos todo el tiempo, pero no se puede engañar a todos todo el tiempo.

Abraham Lincoln

miércoles, 9 de junio de 2010

¡Oh, oh, sorpresa!

Y como todo el mundo sabe la sorpresa no es el fracaso de la huelga de ayer (nos hubiera gustado equivocarnos pero no fue así) La sorpresa es lo de Vivartia. Hoy todos los medios hablan de ellos. Desmantelan Mildred, se llevan las máquinas a los USA. Pobrecito Aliaga: otro fracaso más. Y es que no para este hombre, no acierta ni una.

Bueno, sorpresa para todos no, algunos ya sospechábamos algo desde hace tiempo. Ahora ya sabe todo el mundo que los 400 puestos de trabajo perdidos no se recuperarán. Aliga estuvo al frente de aquellas negociaciones y Aliga es quien debe dar la cara.

Los sindicatos manifiestan su sorpresa pero no dicen nada. Al Ayuntamiento ni está ni se le espera (eso faltaría, ¿qué tiene que ver con él?) y el Gobierno de Aragón...

¿Nadie va a pegar un puñetazo en cima de la mesa? ¿Nadie va a pedir responsabilidades políticas? ¿Nadie va a pedir la dimisión del Consejero?

Vale que en Mildred trabajaban sobre todo mujeres y además eran casi todas moras y sudacas pero... aún así, algo de vergüenza torera debería quedar en algún sitio.

Hoy es Mildred (dinero público para los despedidos y beneficio total para los "empresarios", 8 millones de euros quiero recordar que fue la compra de la fábrica.

Hoy es Mildred, decía, pero mañana será LUNA. Y pasado la que sea. Todo para el buen funcionamiento de la economía.

Estamos manejados por una pandilla de intrigantes mediocres y entre los gobernados son mayoría los mansos y los borregos. Así no hay forma.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Leo que Vivartia ha comprado la empresa. Si la ha comprado, suya es y hará con ella lo que quiera. Son sus ocho millones de euros. ¿ha recibido Vivartia ayudas públicas para comprar esa fábrica?

Espartaco dijo...

Tiene usted razón. Si lo único que sabe es eso tiene toda la razón. Pero claro, su información es una foto fija y no sabe de donde viene.

Le pongo un ejemplo: Veo en la foto que fulanito ha llegado primero a meta y por lo tanto es ganador. Eso es así. Sin embargo si además de conocer la foto ha tenido usted la suerte de ver la carrera entera y ha visto que fulanito ha hecho trampas, ha dado codazos, empujones, sus amigos del público han saltado a la pista y a los que iban primeros les han dado una paliza y además los jueces han descalificado al resto de competidores, usted sabe que fulanito ha ganado haciendo trampas. Usted conoce, o dice conocer, la noticia de ahora, pero desconoce cómo se ha llegado a esta situación.

Y le digo todo eso sin entrar a más consideraciones de corte político sobre el neoliberalismo, las deslocalizaciones y todas esas zarandajas que no le gustan ni un pelo.

Anónimo dijo...

Claro, usted sí que sabe. Los demás no. Pero usted no acusa a nadie de nada. No. Y además de no acusar a nadie, porque no dice nada, usted no existe, porque usted es anónimo. Vamos, que aquí nadie ha acusado a nadie de nada, pero un nadie sabe algo de una foto que sólo sabe el nadie.

Unknown dijo...

Los demás si. Cualquier persona de Huesca, mínimamente informada, sabe la historia de Mildred y cuestiones tan chuscas como el papel jugado por Eusebio Lázaro o la “inmensa alegría” del PAR por la compra de Vivartia

Espartaco dijo...

De lo que se deduce que el estimado anónimo o no es de Huesca (ni de Aragón ya que fue noticia de alcance regional), o es un indocumentado (es decir mal informado) o bien es un aprendiz de polemista tripitidor, sin gracia de ningún tipo y además le auguro que no pasará de primer curso.

Anónimo dijo...

Ale, pues hablen, venga, hablen, no se preocupen que les protege el anonimato. ¿Qué saben ustedes que sabe todo el mundo y no puede decirse en voz alta?

dAv!d dijo...

¿Y se sabe algo de Oscainox? Porque veo con asombro instalarse en sus naves a VAT y me entra la curiosidad de cómo se concretó el cierre, de dónde salió el dinero de las indemnizaciones, qué fue de las subvenciones y qué ha sido de las costosísimas máquinas que quedaron dentro de las naves cuando a los trabajadores se les ponía de patitas en la calle echando cierre al candado. ¿No sería interesante investigar algo sobre eso?

Unknown dijo...

Sorpresas positivas