Se puede engañar a todos poco tiempo, se puede engañar a algunos todo el tiempo, pero no se puede engañar a todos todo el tiempo.

Abraham Lincoln

lunes, 20 de diciembre de 2010

Encuestas

No tengo tan claro el análisis que hacen de las encuestas los navegantes de la red.

Sí, llevamos un tiempo largo en que la publicación de encuestas en los distintos medios de comunicación publican lo que todo el mundo sospecha: el PP ganará las próximas elecciones, el PSOE bajará bastante y el resto se alterará muy poco, voto arriba, voto abajo porcentualmente hablando, claro, si luego aplicamos la ley D'Hont las cosas cambian, y bastante, en los escaños a repartir.

Pero veo como mientras los votantes del PP se reafirman en sus comentarios y sacan pecho ante una situación que debería provocar sonrojo (a duras penas pueden lograr una mayoría absoluta), los votantes del PSOE guardan silencio y los vontantes de IU piden a los votantes del PSOE que no se queden en casa y que voten a IU con el objetivo de tener 40 o 50 diputados y así gobernar con el PSOE con políticas de izquierdas de verdad.

Claro, leo estas cosas y me doy cuenta del peso fundamental que tienen las siglas históricas de un partido, no sólo entre los votantes del PSOE sino entre los votantes de IU.

Analicen bien la cuestión: esos votantes de IU que reclaman el voto de los desencantados del PSOE (hasta allí correcto, también lo hacen los del PP) lo hacen con la intención de hacer políticas de izquierdas ¡con el PSOE!

Sí, sí, como lo oyen, como lo leen, creen que con una IU fuerte en el parlamento el PSOE podría pactar un programa de izquierdas con ellos.

Eso sólo puede pasar si IU deja de ser un partido de izquierdas y se convierte en otro del sistema.  (Con todas las dudas que mantengo sobre la naturaleza de IU)

Si partimos de la hipótesis que IU es una fuerza de izquierdas, alternativa, anticapitalista, por definición es imposible que pueda llegar a acuerdos con el PSOE, no porque no tenga algunos puntos de coincidencia, que seguramente tiene, sino porque el PSOE mostraría un profundo rechazo a esa propuesta.  Descarta la idea desde su concepción.  Y lo hace por varios motivos pero me voy a centrar en el que me parece más importante: por incompatibilidad de proyectos.  La socialdemocracia europea es un partido sostén del modelo capitalista neoliberal y aborrece cualquier proyecto de cambio hacia la izquierda.  Ejemplos los hemos tenido incluso en el corazón de Europa como la gran coalición entre socialdemócratas y conservadores en Alemania (como consecuencia del auge de La Izquierda), pero los podemos seguir en las coincidencias en el Parlamento Europeo, por ejemplo el bochornoso papel del PSOE apoyando a Barroso en su primera votación.

Esa realidad, esa evidencia, histórica en España, ya ha provocado que el PSOE siempre se haya decantado por cualquier otra opción antes de IU (Catalanes, vascos, canarios...) y que en los grandes temas asuma un gran acuerdo con el PP aún en contra de sus bases.

Por no alargarme más: me sorprende, sí, que los votantes-militantes de IU que reclaman más votos para la Izquierda crean todavía en poder forzar al PSOE ha realizar políticas progresistas.  Eso, indudablemente, es el peso de las siglas, la fachada, la careta y todavía nos manejamos por lo que cuentan, no por lo que hacen.

En segud

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Entonces los votantes de izquierdas, alternativos y anticapitalistas a quien tienen que votar? a que partido?

Anónimo dijo...

nos manejamos por lo que cuentan, no por lo que hacen, dice el tio. hace falta ser hipocrita.

Anónimo dijo...

Lo que sorprende es que Izquierda Unida tenga votantes. Eso sí que fidelidad a la marca.