Se puede engañar a todos poco tiempo, se puede engañar a algunos todo el tiempo, pero no se puede engañar a todos todo el tiempo.

Abraham Lincoln

lunes, 21 de febrero de 2011

Libia y la democracia.

Algunos descubren ahora que Libia tampoco es un régimen árabe moderado pese a que Gadafi y sus 300 vírgenes se paseen por los pagos de Berlusconi o que sus caballos sean de pura sangre.

Lo cierto es que lo que ha pasado este fin de semana en el mundo árabe es tremendamente poético.  Las movilizaciones se multiplican y dispersan por diferentes lugares de la geografía, cada una de ellas con su carácter singular y diferenciador, no es lo mismo Marruecos que Bahrein pero en todas ellas, como en la Revolución del 48, la conocida Primavera de los Pueblos, un ansia de democracia y libertad se extiende por todas ellas.  También tiene otro aspecto singular esta movilización popular: la ausencia de violencia por parte de los insubordinados.  Hasta la fecha una revolución que se preciase tenía como singularidad un alzamiento armado que desembocase en la toma del poder.

En este caso las movilizaciones previas no desembocan en una violencia armada sino en unos métodos no violentos, de protesta ciudadana que soportan con valentía la represión del poder.

Sin embargo me gustaría centrarme en Libia, a modo de ejemplo, para en este comienzo de semana proponer una comparativa: El régimen libio está soportando las protestas más importantes de la última década (no son las primeras ni excepcionales pero sí las más importantes) hasta el punto que han llevado a focalizar el centro de atención de los medios de comunicación internacionales.

Sí, todos sabemos que no tienen tanta importancia para occidente.  Cierto, es el país africano con mayor reserva de petroleo pero estratégicamente es más interesante lo que pueda ocurrir en Jordania o incluso en Marruecos aunque tiene un aire ejemplificante que me parece oportuno destacar.

Este fin de semana en Egipto se ha vuelto a ver una movilización ciudadana (dos millones dicen) reclamando medidas democráticas.  En este blog hemos manifestado nuestro temor a que todo este proceso quede reducido a la nada, que en todos estos países se busque una solución controlada, una especie de Transición a la española donde se de un barniz de democracia pero que las estructuras de poder reales no cambien.

Algunos lectores del blog han puesto el grito en el cielo demostrando su militancia democrática de toda la vida así que para ilustrar el razonamiento pretendo ejemplificar con Libia.

¿Imaginan que la caída del Régimen de Gadafi consistiese tan sólo en la huida del dictador a cualquier país, si quieren ustedes con su extensa familia incluidas las vírgenes y sus jaimas (Francia es un buen lugar) y que el resto de la estructura del estado represor continuase en su sitio (ejército, policía, jueces...) y fuesen ellos los encargados de realizar el cambio a la democracia?

Es más, imaginan que todo ese proceso estuviese vigilado por el consejo supremo del Ejército (los generales de Gadafi, claro está) y que nosotros diésemos por bueno ese proceso como un proceso democratizador?

Imposible, ¿verdad?  Nadie en su sano juicio se lo creería, nadie pensaría que ese régimen, antes terrorista y ahora moderado, se encaminaba a una verdadera democracia.  Sin embargo sí nos quieren hacer creer que en Túnez, en Egipto... eso es lo válido y lo bueno.

Y es que una revolución triunfa (con unos métodos u otros) cuando los revolucionarios alcanzan el poder, lo ocupan y no parece ser ese el caso de la nueva primavera de los pueblos árabes.  Y no porque ellos no lo deseen es, entre otras cosas, porque nosotros no queremos.

19 comentarios:

Anónimo dijo...

Una duda, ¿Usted cree en la rehabilitación y reinserción en la sociedad de los presos?.

Espartaco dijo...

Como supongo que es una pregunta trampa voy a seguir el juego:

Por filosofía sí aunque en la práctica sé que hay casos que son irrecuperables, carne de cañón (desgraciadamente)

Su turno.

Anónimo dijo...

¿Que habría que haber pasado con los alemanes tras el regimen nazi, ya que una aplastante mayoría lo apoyaron o no hicieron nada para impedirlo? ¿o con los integrantes y cuadros de mando del partido comunista sovietico en tiempos del camarada Stalin?

Anónimo dijo...

Mucha berborrea para ocultar que hace cuatro días usted explicaba como las revueltas ocurrían en países árabes títeres de occidente y trataba de maquillar a Gadafi con los niveles de desarrollo humano.

Espartaco dijo...

Sí, sí, es cierto, el régimen nazi tenía una aplastante mayoría de población que lo apoyaba, tan sólo hay que ver el resultado de las elecciones a lo largo del proceso de ascenso de partido nazi al poder (Ironía, claro está)

Tampoco debemos olvidar quienes fueron los primeros alojados en los campos de concentración (todos ellos partidarios del régimen) Cierto, cierto. Es más, si hace usted la comparativa con Franco, ese Hombre, verá que el apoyo fue masivo tras asesinar a los que manifestaban cualquier tipo de oposición (primero en la guerra y después durante unas décadas más)

Oiga, esas aplastantes mayorías suyas me inquietan.

Supongo que a los que se refiere entonces no es a los muertos por represalia ni a los muertos tras el conflicto bélico así que se refiere a los supervivientes ¿no?

Y sobre esos supervivientes, por ejemplo, Manuel Fraga, ¿qué quiere que piense? ¿qué se puede rehabilitar? Estoy convencido de ello, sólo tiene que ver las filas del PP o del PSOE para ver como muchos de esos o sus herederos siguen ocupando el poder. ¿no ha visto esos correos que corren por internet explicando el pasado de los dirigentes del PP y del PSOE?

¿Acaso duda usted de que todos ellos, si excepción, son demócratas de toda la vida?

Por cierto que sigo insistiendo en lo de las estadísticas, lo que pasa es que usted entiende las cosas un poco de aquellas maneras, pero podemos poner estadísticas también de otros moderados, los Saudíes.

Anónimo dijo...

Me ha entendido perfectamente, ponia el ejemplo de la Alemania en 1945, que hacer con todos los que integraban el ejercito, la policia, los jueces, los funcionarios, miembros del partido, los que por un miedo más que justificado no hicieron nada. Que habra que hacer con todos los cubanos que durante estos años han mantenido a Fidel y su hermano en el poder. Cuando se pasa de un sistema a otro por lo general no se puede erradicar y dar carpetazo a todo lo anterior, de lo que se trata es de mejorar todos. Ahora se vive mejor que durante la dictadura de Franco o lo parece a usted que no es así. Respecto al democrata de toda la vida de Fraga, que no es santo de mi devoción que quede claro, en el País de hoy salen publicadas las actas del 23-F y por lo que parece su actitud fue bastante loable (y valiente). Las personas evolucionan, los dogmas no.

Anónimo dijo...

No son las primeras revoluciones pacíficas. Las que acabaron con las dictaduras que dirigían sus camaradas de los partidos comunistas también fueron pacíficas, excepto el caso de Rumanía. Claro esas usted prefiere olvidadlas.

Anónimo dijo...

A mi la tiranía saudí me gusta tan poco como la de libia. Usted es el que hace distinciones en dictadores mejores o peores.

Anónimo dijo...

Hay que tener en cuenta que Espartaco parte de dos presupuestos: el primero, que los Estados Unidos son malos y, por lo tanto, todo lo que esté en contra de los EE.UU. es bueno. El segundo es que si las revoluciones contra las dictaduras triunfan es gracias al "pueblo", y si fracasan es porque los Estados Unidos malmeten a los "revolucionarios". Entonces: cuando Gadaffi no podía pisar un país donde rigiera el estado de derecho porque se le iba a detener, Gadaffi era bueno. Ahora, que los EE.UU. le toleran, Gadaffi es malo.

Lo que no cuenta Espartaco es que las protestas (me niego a llamarlas revoluciones) quizás busquen que en sus países las cosas se parezcan más a los derechos y libertades de los que disfrutamos en los países capitalistas "malos". Que las protestas lo que quieren es acercarse más nuestro modelo. Como parece que eso es así y no son las auténticas revoluciones proletarias y anti-capitalistas que desearía Espartaco, Espartaco concluye que los "regímenes" están desvirtuando y desviando las protestas, con la ayuda de los "capitalistas" malos.

Y además: hay que ver lo que sabe Espartado de Oriente Medio. Una barbaridad. Sabe más incluso que los manifestantes y los gobernantes.Qué pena que expertos con conocimientos tan profundos estén tan desaprovechados. Podría escribir un libro.

Anónimo dijo...

Es que las autodenominada izquierda anticapitalista sigue anclada en discursos y esquemas de los años 60/70.

Espartaco dijo...

Un libro no, varios. Espartaco es un ser milenario, casi mítico, ejemplo y modelo del bien frente al mal, del pobre frente al rico, del esclavo frente al amo, del explotado frente al explotador...

Sí, Espartaco es un símbolo y además de eso es humano... pero no, no se preocupen que además de que ustedes puedan leer lo que escriba Espartaco tenemos al Craso anónimo que se encarga de contar lo que Espartaco no escribe pero piensa.

Así son las cosas, la derecha que representa Craso tiene a Espartaco absolutamente encasillado y lo que realmente le fastidia no es lo que dice Espartaco, lo que le fastidia es que Espartaco no dice lo que le gustaría que dijese. Eso tiene a los Crasos anónimos absolutamente desconcertados y ese desasosiego espiritual les cabrea notablemente porque no pueden hablar de la izquierda dogmática (así que se la inventan) o de los derechos humanos (así que se inventan que Espartaco está en contra de los mismos) o incluso ellos, los Crasos, se autoproclaman demócratas excluyentes no admitiendo ninguna crítica a la democracia formal que persiga profundizar en ella (lo que pretende Espartaco) porque... porque quedarían en evidencia. Al fin y al cabo los Crasos (en este caso nuestro anónimo) es un "demócrata de toda la vida" como Don Manuel.

Anónimo dijo...

Verá, en derecho, el "fondo" y la "forma" son lo mismo. Las democracias son lo que son sus formas, ni más ni menos. No hay más democracia real que la formal, y viceversa. Usted plantea que la democracia real está alejada de la "formal", que disfrutamos. No es cierto. Lo que sí es cierto es que usted quiere unas formas democráticas que los demás no queremos. Confunde "democracia real" con "la democracia en la forma que a mí me gustaría" (no sé si asamblearia, soviética, o qué)

Y en cuanto al tema de Libia y el resto del magreb, parece claro que lo que quieren muchos habitantes es un poco más de esa democracia "formal" que tenemos aquí, y que algunos desprecia.

Espartaco dijo...

Bueno, lo de las formas y el fondo no sólo lo pienso yo. Sobre este asunto le dejo el enlace de un artículo que copié íntegramente y que ya produjo debate con las mismas posturas, los unos (bueno, mejor con H), demócratas de toda la vida defienden que este es el mejor de los sistemas y no tiene mejora, los otros, entre los que me incluyo (y la izquierda también) dicen que la democracia vigente es muy imperfecta y que hay que rehacerla (usted, claro no es de éstos)

Le dejo el enlace porque habla de un buen libro con unas buenas reflexiones de unos buenos pensadores que a usted le da igual. Un saludo.

http://espartaco-ysinembargosemueve.blogspot.com/2011/01/democracia-en-suspenso.html

Anónimo dijo...

Claro, hay que perfeccionar la democracia, crear una democracia directa y participativa, como la de Gadafi.

Anónimo dijo...

Menuda chorrada ha escrito el anónimo de arriba.

Anónimo dijo...

Nada de chorrada amigo. El modelo libio, socialista, asambleario, autogestionario, bla, bla, bla, ha sido puesto como ejemplo por muchos teóricos de la izquierda auténtica, anticapitalista y revolucionaria. Esa que le gusta a Espartaco y a sus palmeros, que por cierto están muy calladitos.

Espartaco dijo...

Yo pensaba que el dictador sanguinario, desde que dejó de ser terrorista era amigo nuestro y ahora resulta que no, que es un dictador sanguinario (lo de si sigue siendo terrorista todavía no nos lo han dicho, aún no hemos recibido la consigna en los medios de comunicación de masas, pero todo se andará)

Yo pensaba que la amistad del dictador sanguinario con Italia, España, Gran Bretaña, los USA era por algo más que el petroleo, que era porque se había trasformado en un régimen moderado pero veo que no, que la amistad manifiesta con ZP o con Aznar era tan sólo mera cortesía y que las armas que hemos vendido al dictador sanguinario durante estos años en realidad eran como los cañones de Gila: no tenían agujero.

Es cierto, no tenemos nada más que leer las hemerotecas de la prensa liberal (ABC, La Razón, El País...) para ver los calificativos que se le daban al dictador sanguinario cuando era nuestro amigo, le vendíamos armas, le comprábamos petroleo y no atacaba a Israel.

(Me gusta lo de los palmeros, ¿pero usted cree que son todos míos o hacen palmas a alguien más?)

Anónimo dijo...

Claro, claro. Para unos empezó a ser bueno cuando cambió su política exterior. Para otros, como para usted quizá, empezó a ser malo entonces y hasta ese momento era un gran lider revolucionario anticapitalista, antiimperialista y atisionista. Para mi siempre ha sido lo mismo: un tirano demagogo y criminal.
De todas formas quizá la postura coherente sería que a las dictaduras ni agua. Claro que entonces, según el discurso del dictador se empezaría hablar de bloqueos del imperialismo y sandeces parecidas para justificar sus crímenes.

Espartaco dijo...

Le dejo esta reflexión de Pascual Serrano al respecto:
http://www.pascualserrano.net/noticias/bfpero-habia-una-dictadura-en-tunez

El sitio web de Pascual Serrano es interesante porque sus análisis son certeros, profundos y sobre todo a modo de flashes, aquí le dejo un ejemplo:

"Por supuesto el diario ABC se ha sumado a todos los medios que ahora -y sólo ahora- califican al presidente y expresidente de Egipto y Túnez de dictadores. En las página 28 y 29 del 24 de enero titulan con la expresión “viejo régimen” al gobierno de Túnez y califican de “dictador” a Ben Alí. Algo que contrasta con dos páginas después, allí informan de la convalecencia del dictador saudí Abdalá bin Abdelaziz, y las denominaciones son “rey Abdalá” y “monarca saudí”. Es evidente que, mientras se le pueda mantener en el poder, se le seguirá considerando amigo por mucha represión y dictadura que mantenga en su país. Sólo cuando los ciudadanos le derroquen con su correspondiente coste de sangre, se atreverán a llamarle dictador."