Se puede engañar a todos poco tiempo, se puede engañar a algunos todo el tiempo, pero no se puede engañar a todos todo el tiempo.

Abraham Lincoln

viernes, 25 de noviembre de 2011

Ellas deben complacerles

Es terrible.  Tantos años de lucha, de incomprensión, de revolución sexual para llegar a esto.  Hoy, el Día Internacional contra la Violencia de Género nos tenemos que desayunar con un estudio de la Federación de Mujeres progresistas que es alarmante. La noticia está en todos los medios así que, al azar cogemos uno, el Diario de Navarra, quien hace un resumen de la noticia.

Tremendo.  Y lo que de ello se deriva: la no relación entre machismo y violencia.

Claro que esto no debe tener un análisis aislado de la evolución de la sociedad en los últimos 20 años.  Los valores del capitalismo neoliberal se han impuesto como hegemónicos: el individualismo, la preponderancia de la fuerza, la descomposición de lazos sociales y familiares, la falta de referencias, el consumismo...  Todo ellos explica muchos comportamientos sociales (y electorales).

Hace tiempo que venimos defendiendo en este blog que la derrota de la izquierda tiene su origen en la derrota de las ideas y valores de la izquierda y que su recomposición será difícil y traumática.

Traumática porque sólo llegará al evidenciarse las consecuencias sociales de las contradicciones del propio capitalismo que provocará estallidos de violencia generados por la pérdida de estatus social de toda una generación y el aumento de la pobreza en el mundo occidental.

Difícil porque la realidad virtual se ha impuesto en la percepción del mundo sobre la realidad "real".  Los medios de comunicación se encargan de transmitir valores de forma machacona y reiterativa.  Lo hacen con los anuncios, con las películas, con las series, con los dibujos para niños, con los realitys... incluso con la forma de abordar las noticias.  Y por supuesto con los gustos musicales y culturales.

Ese cambio de valores incide directamente sobre una población, la joven, que tiene como referencia un pensamiento plano y sin contenido: es el estilo de vida americano, el del Papá Noel que en pocos días inundará nuestras televisiones, el de las series televisivas de muertos y asesinatos, de coches grandes y viviendas lujosas.

Claro, todo esto es teoría así que pongamos dos ejemplos prácticos.  El primero es un clip de un grupo de Rap Hip Hop con dos claros mensajes: dinero y sumisión de la mujer al hombre.



El segundo son sus consecuencias prácticas:

4 comentarios:

Víctor C. dijo...

Es verdaderamente triste que los jóvenes piensen así. Creo que ellas sí nos tienen que complacer, pero de la misma forma que nosotros tenemos que complacerlas a ellas.

He visto la noticia de ese estudio. Se ha realizado sólo en las provincias de Madrid y Burgos, si no me equivoco y se ha preguntado a 1936 personas. No dicen si se ha pregunta a 968 chicas y a 968 chicos o en qué porcentaje se ha preguntado a unos y a otras, dato que sería de suma importancia.

Por otra parte, lo que no podemos es igualarnos, o pretender que seamos iguales en aspectos biológicos. Precisamente son las diferencias biológicas las que hacen atraerse a sexos opuestos. Por lo que hay que luchar, y debemos sentirnos obligados a luchar, es por la igualdad en derechos y en deberes, sin que existan discriminaciones ni positivas ni negativas. La lucha debería encaminarse en igualar derechos y deberes, no en igualar ningún otro aspecto, en estos otros aspectos que cada uno sea como quiera, mientras no perjudique a terceros.

Hay que diferenciar entre el feminismo y el feminismo radical. Yo defiendo el feminismo.

METAL dijo...

Está claro que hemos hecho algo mal con la educación de las generaciones escolarizadas después del franquismo (lo de antes no comento), ni se respeta a las mujeres, ni se respeta lo publico, se establecen patrones conductuales perversos. De todas formas la escuela lo tiene muy difícil con estos mass media.
Un cordial saludo.

Anónimo dijo...

Lo que también está claro es que esa clase de actitudes se encuentran tanto entre la "sacrosanta" clase obrera como entre los más pudientes, y tanto entre votantes de izquierdas como entre votantes de derechas.

Anónimo dijo...

Anónimo,
podría saludar por lo menos.