En Zaragoza el PSOE tiene una propuesta: en cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica y por decencia van a retirar el nombre de las calles que tengan conotaciones franquistas. Bien, aplausos.
También, como consecuencia de lo anterior sustituirá General Sueiro por Monseñor Escrivá de Balaguer.
¿Sorpresa? ¿Perplejidad? No, ninguna, al fin y al cabo es el PSOE, el mismo que mantiene la religión en la escuela, el mismo que no denuncia el Concordato (preconstitucional) con la Santa Sede, el mismo que mantiene símbolos religiosos en edificios públicos y los emplea para aceder al cargo de Ministros o lo que sea... en definitiva, el mismo PSOE que también en Zaragoza ha prohibido que sus autobuses municipales puedan llevar la publicidad de la campaña atea (la de la polémica)
Al menos yo lo encuentro normal. Es el PSOE.
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