Nos informa hoy la edición de digital de Público ( http://www.publico.es/espana/249524/jaume/durgell/republicana/bandera/monarquia/rey/tricolor ) que un muchacho llamado Jaume d'Urgell que puede entrar en la cárcel porque en el año 2006 colocó una bandera republicana en un edificio público en Madrid.
Más allá de cuestiones ideológicas lo que me llama la atención es el delito cometido: ultraje a España. Ultraje a España, casi nada. El delito me retrotrae a otras épocas, a otros momentos históricos, y ni tan siquiera de un pasado no tan lejano sino al mismo siglo XIX o anterior.
Piénsenlo bien: ultraje a España. Curioso delito. En otros países la libertad de expresión está por encima de ninguna milonga de este estilo. Incluso en los USA el quemar una bandera yanki, la de las barras y las estrellas, no está penado por primar la libertad de expresión sobre cualquier otra consideración. Pero aquí no, aquí, como si fuese éste un país feudal continúa el delito de Ultraje a España. No el de traición, no, el de ultraje.
Y luego son éstos mismos los que ponen a parir al nacionalismo periférico. Ultraje a España; manda huevos.
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