Se puede engañar a todos poco tiempo, se puede engañar a algunos todo el tiempo, pero no se puede engañar a todos todo el tiempo.

Abraham Lincoln

viernes, 19 de febrero de 2010

Un caballero español

Dijo F. González, cuando en la Autónoma de Madrid le abuchearon que eso iba en el sueldo. Z.P. comentó en el pasado día de la Raza, en Madrid, ante sonoros pitos por parte de los asistentes que "ya forma parte de la tradición"

Sin embargo tenemos a todo un personaje, que visto en bañador es la envidia de Swazernager, deben ser de la misma edad, que se pasea por el mundo renovando las viejas glorias del hidalgo viejo castellano, esbelto, altivo, orgulloso de su casta, esencia de los valores patrios hispanos, tarro de las esencias, ávido de nuevas glorias y porrompomperos imperiales, en defintiva, todo un español de primera división.

Aznar, a quien me refiero, por supuesto, es un demócrata de toda la vida, faltaría más, y por lo tanto entiende perfectamente la disidencia. Y para muestra un botón:



Gracias, expresidente, ¡Tú sí que sabes blandir bien nuestra insignia patria por los foros extranjeros con orgullo y pasión! Tu imagen es (y será) eterna.


Nota. El gesto en ámbitos futbolísticos es conocido como la peineta.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Buen comentario sobre la tontería de hoy. El patio de vecinas se anima. La verdulera del primero, izquierda, pone a parir a la verdulera del primero, derecha. Mientras tanto el vecino del ático sale a la calle, pasa entre ellas, escucha sus insultos mutuos, piensa ¡verduleras! y se va a resolver asuntos más importantes...
(con todo mi respeto a las verduleras reales)

Anónimo dijo...

los cerditos de izquierdas se revuelcan en la mierda de los cerditos de la derecha. ¡qué bien se lo pasan los cerditos!