Se puede engañar a todos poco tiempo, se puede engañar a algunos todo el tiempo, pero no se puede engañar a todos todo el tiempo.

Abraham Lincoln

lunes, 7 de abril de 2014

Esperanza Aguirre: ejemplo de liderazgo

El líder natural es una figura histórica que ha surgido en todas las comunidades y civilizaciones.  Son personas con un atractivo especial entre las gentes a las que se dirige y que responden, por sus actitudes y personalidad excéntrica, a los anelos frustrados de sus seguidores: son los líderes quienes hacen y dicen lo que no se atreven a hacer o decir los demás.

Esperanza Aguirre es la "lideresa" (como le gusta definirse a sí misma) de la derecha más dura española, una figura mediática, populista y muy agresiva contra los demonios eternos que asolan el suelo patrio: los rojos, los homosexuales, los ateos, los sindicalistas, los separatistas, los librepensadores... y sobre todo los igualitaristas.

Estos días hemos podido comprobar como la enorme legión de seguidores que tiene ha salido en tropel a defenderla, porque las críticas a su comportamiento ante la huída de la policía ha sido vivida por éstos como una crítica a su fuero más íntimo.

Al fin y al cabo, como bien ironizan algunos, Esperanza Aguirre representa a una casta superior que está por encima de los demás, representa al clasismo histórico que atenazó el modelo liberal de finales del siglo XIX, es la mejor imagen de los vencedores de una guerra (la del 36) que sirvió para poner en su lugar al pueblo llano y recuperar los privilegios que había amenazado el régimen republicano de 1931.  Una gentuza que confunde el Estado con su cortijo y que no permiten, de ninguna de las maneras, que eso que llaman Estado de Derecho les pueda afectar ni en lo más mínimo.

Esperanza Aguirre es líder porque habla y actúa como querrían hablar y actuar sus seguidores y sus votantes.  En España son millones quienes se creen superiores a los demás, quienes justifican las desigualdades, que los pobres coman de la basura o vivan de la caridad, en defintiva quienes creen que la igualdad es un término perverso.

Esperanza Aguirre actuó la pasada semana conforme se espera de ella, sin complejos, sin hipocresía, mostrándese tal cual es, mostrando a sus fieles que sigue siendo su lideresa.

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