Puertas al campo

Es el sino de los tiempos, represión.  También en Huesca y desde el Ayuntamiento.  No hace tanto que se aprobó una Ordenanza de ¿Convivencia? que, como toda norma que se precie, tenía, y tiene, un apartado relativo a las sanciones.  Ya de por sí no deja de ser chocante que la convivencia se fuerze mediante la sanción en vez de la educación, recuerda un poco aquello de la letra con sangre entra.

Hoy nos informa Radio Huesca de los primeros resultados de la puesta en marcha de la Ordenanza: el 41% de las sanciones son consecuencia del botellón. Le sigue, a cierta distancia la tenencia de animales y luego un pelotón formado por ruidos, limpieza viaria y ¿uso indebido del espacio público? (respecto a este último no sabemos si se refiere a mendicidad, mear en la calle, venta ambulante...)

Botellón, botellón es la noticia.  Claro, es una novedad que la gente joven beba alcohol, que lo haga en grupos y además que lo haga en lugares públicos.  Nunca en la historia de la humanidad había ocurrido nada semejante y por ello es necesario cortar de raíz este tipo de desviaciones.

Ignoramos si la ordenanza y las sanciones que de ella se derivan obtendrán los resultados apetecidos, en un principio que no se beba en la calle) pero será interesante ver la respuesta que las masas juveniles ofrecen ante las medidas punitivas.  ¿Se quedarán en casa los fines de semana por la noche?  Apostamos que no.  ¿Dejarán de beber con el ultrajante fin de emborracharse?  A buen seguro que tampoco.  ¿Volverán al redil de los bares baratos con la perversa intención de tomar garrafón?  Es una posibilidad aunque con bajos porcentajes.  Entonces ¿cuál será la respuesta?  No lo sabemos.  Es posible que vuelvan a recuperar locales y pisos vacíos para sus juergas y tropelías, puede ser que recuperen los espacios exteriores (polígonos industriales y descampados) con el consabido peligro del alcohol y los vehículos a motor, quizá opten por otras soluciones más imaginativas, quien lo sabe, pero lo que es seguro que no se pueden poner puertas al campo.

La ordenanza del PP y su régimen sancionador está en línea con las políticas represoras del PP nacional.  La diferencia en Huesca es que, suponemos, el PSOE y la CHA deben de estar locos de contentos ya que esta es la solución que formularon al botellón... de las Fiestas de Sanlorenzo.