Se puede engañar a todos poco tiempo, se puede engañar a algunos todo el tiempo, pero no se puede engañar a todos todo el tiempo.

Abraham Lincoln

miércoles, 26 de marzo de 2014

Tácticas de guerrilla urbana venezonala en España

El PP está que se sale, en su salsa, gritando a tirios y troyanos que ellos son la más alta representación de la democracia y los garantesde la ley y el orden  frente a los vándalos violentos antisistemas ultraizquierdistas que quieren "matar policías".

(Se refieren, naturalmente a los cientos de miles de personas que particparon en la manifestación y a los que la apoyaron desde sus casas, a todos)

Es lo que estaban buscando desde hace tiempo para justificar una nueva ley de seguridad ciudadana que no sólo está siendo cuestionada por la oposición española, también por la propia Unión Europea, una ley represora y que vulnera los derechos fundamentales, una ley que ya ha recibido los primeros rapapolvos del Consejo de Estado, una ley absolutamente innecesaria en un país que después de años y años de movilizaciones masivas por toda España tan apenas ha habido incidentes dignos de mención.

Por eso la violencia del pasado 22 es tan beneficiosa para el PP, una violencia que ha importado las técnicas de guerrilla que se está aplicando en Venezuela.

Hay que aclarar, llegado este punto, que la violencia en Venezuela está provocada por la oposición al chavismo (si usted es lector habitual del blog lo sabrá, si es nuevo en estas páginas quizá se lleve una sorpresa, pero la realidad es así) y que los muertos son mayoritariamente policías o ciudadanos contrarios a la oposición que han sido asesinados de diversas formas (francotiradores, trampas de cordeles metálicos...)

¿Esa es la violencia que han importado los manifestantes españoles?  No, las tácticas importadas han venido por parte de la policía española, las de la mentira y la manipulación.

La muleta espada o el tirachinas con bolas de acero han resultado burdas falsificaciones de los sindicatos policiales, esos que piden mano dura en incluso
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 tirar con pistola si es necesario.  Ustedes, que creen que esto es un estado de Derecho, pensarán que si en Venezuela encausan a los policías que abusan de su autoridad (15 de momento) en España con más razón ya que la falsificación de pruebas es un delito.  Están equivocados.  No en lo del Estado de Derecho, de eso no opinamos, sino en que se pueda procesar a un agente de la ley por falsificar pruebas.  En España eso no pasa.  No pasa nunca nada y cuando pasa algo se les indulta tantas veces como haga falta y punto.

La respuesta de la Delegada del Gobierno, sra. Cifuentes, en vez de abrir expedientes a la policía falsificadora y mentirosa, ha sido abrir más expedientes a los participantes de las manifestaciones, al fin y al cabo es una demócrata y representante de un partido que es la esencia de la democracia.  De toda la vida, oigan.

La policía es mentirosa, vale, el Gobierno miente, nos tiene acostumbrados a la mentira para justificar, no ya excesos sino muertes (recuerden los 15 muertos de Ceuta), la policía se infiltra y provoca los desórdenes, no es la primera vez ni será la última, los heridos graves siempre son los mismos y el pueblo, como dice Julio Anguita, es pacífico: "Acusarnos de violentos es, además de una falsedad, una tontería. Si hubiésemos sido violentos, los 1700 policías desplegados habrían sido neutralizados en un santiamén. No digan estupideces."



¿Entonces?  ¿Dónde están las tácticas de guerrilla urbana venezolana?  ¿Aún no las han encontrado?  En la mentira y en la falsedad.  Quienes provocan la violencia se presentan así mismos como víctimas con la falsificación de pruebas y el respaldo de los medios de comunicación que no se dejan manipular ya que son parte de la manipulación.  Ese es el modelo venezolano: la opinión pública, informada a través de sus canales habituales tiene la misma opinión sobre Venezuela que de las manifestaciones del pasado 22 de marzo.

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