Se puede engañar a todos poco tiempo, se puede engañar a algunos todo el tiempo, pero no se puede engañar a todos todo el tiempo.

Abraham Lincoln

viernes, 4 de abril de 2014

Conspiración contra Espe


Ayer, pasadas las cuatro de la tarde, la consorte de la nobleza por antonomasia, sufrió un grave incidente fruto de una conspiración internacional, que los rojos y masones españoles están aprovechando para ensuciar su imagen e impedir que en un futuro inmediato pueda acceder a las más altas magistraturas del Estado.

Unos agentes de movilidad del ayuntamiento de Madrid la retuvieron de forma ilegal en plena calle y, bajo falsas acusaciones, y ante la sorpresa de los viandantes y de los españoles de bien que en ese momento transitaban por plena Gran Vía madrileña, comenzaron un espectáculo dantesco para que fuese noticia internacional en las cadenas apologetas del terrorismo internacional como Al-jazeera.

Sin embargo la Lideresa no podía sospechar en esos minutos inciertos el origen del complot y pensó lo más natural: eran mossos d'escuadra por lo que, con buen criterio, se dió a la fuga para salvar su vida.  Pero una reflexión posterior de la señora Marquesa (ya en el seno de su hogar y bien protegida por aquellos que lo dan todo por la paga, perdón la patria) se dio cuenta de un detalle revelador: "la moto estaba malísimamente aparcada".  Los separatistas, aunque merecedores de la peor de las maldiciones bíblicas, son buenos concedores del Código de Circulación Español y por lo tanto... ¿de dónde venía la conspiración?

Lo inmediato fue pensar que los agentes de movilidad de Madrid eran ETA así que la Presidenta cogió el teléfono con la intención de llamar a Mayor Oreja para confirmar sus sospechas pero en ese mismo instante sonó el mismo: era Óscar Carromero.

Esperanza le confió lo que había pasado y lo desconcertada que estaba, "¿Hasta dónde íbamos a llegar?  Una cosa es que la policía les corra bien corridos a esos rojos de mierda, que para eso está, y otra muy distinta que traten de hacer cumplir la ordenanza de tráfico a los dueños del cortijo.  Hay que poner en su sitio a esos policías y explicarles que ellos están para lo que están, no para..."  En ese momento Carromero la interrumpió:  "¿No te das cuenta Espe que todo esto es una conspiración del castrismo contra nosotros?  Primero lo mio allá y ahora lo tuyo acá."

Todo encajaba.  Ahora estaba claro.  La polícía seguía cumpliendo con su deber, defender los intereses de los privilegiados y reprimir al pueblo llano.  Lo que había pasado no era un error.  Era un complot comunista.

Por ese motivo, y no otro, un blog patriótico como el nuestro quiere aportar su granito de arena en el esclarecimiento de la verdad.

Sólo pedimos una cosa: que no haga una aparición pública María Dolores de Cospedal para explicar que fue un arranque en diferido en forma de simulación de atropello y deje en manos de Carlos Florian las oportunas aclaraciones ya que es mucho más claro y tiene menos verguenza.

2 comentarios:

Víctor C. dijo...

Llegué a pensar que la versión de Carromero era la verdadera, pero más tarde me incliné por aquella posibilidad de que haya sido ETA, es más, no tengo casi dudas. Además eran etarras machistas contra una sesagenaria.

Víctor C. dijo...

Sexagenaria*