FCC, DORNIER, CCOO

En muchas ocasiones hemos sido críticos en el blog con los sindicatos mayoritarios, pero lo hemos hecho por la dejación de funciones que han realizado y por el seguidismo de las posturas social liberales del PSOE para mayor gloria de la doctrina neoliberal que se impone desde la UE propiciada por su apoyo al tratado de la Unión Europea (de aquellos polvos vienen estos lodos).

Pero la crítica a las políticas sindicales no se traduce en una crítica a los sindicatos.  Los sindicatos son necesarios, cada día más, como instrumento eficaz para la defensa de los trabajadores (que somos todos) frente al abuso de la patronal y el capital financiero.

El mismo día que la Presidenta  del Círculo de Empresarios pide que los trabajadores cobren por debajo del salario mínimo interprofesional (petición acompañada de insultos a los trabajadores), en Huesca, CCOO obtiene una importante victoria sobre una multinacional que ya aplicaba las tesis de Mónica Oriol.  Frente a la demagogia del PSOE y al mal hacer del PP en el Ayuntamiento, un sindicato (en Huesca CCOO merece la pena, no se parece a sus hermanos mayores para nada) consigue una importante subida salarial y mejoras laborales.

El movimiento sindical funciona cuando su orientación es la correcta.  El movimiento sindical recuperará credibilidad cuando se centre en el mundo del trabajo y retome sus tradiciones ideológicas soltando el lastre con que el PSOE ha llenado las bodegas de la nave del sindicalismo.  El interés de un sindicato son los trabajadores no el sistema.  Resolver los problemas del sistema, atenuar sus contradicciones y las desigualdades que genera corresponde al poder, no a los sindicatos.  Y el poder sólo lo hará si la presión en la calle es lo suficientemene importante para que se vea forzado a hacerlo. 

Pero si los sindicatos confunden su papel y creen que la defensa de los trabajadores va más alla de eso para asumir un discurso de "responsabilidad" estarán perdidos y caerán en el descrédito actual.  Los problemas de la patronal, los problemas del capitalismo son suyos, no de los trabajadores ni de sus instrumentos.  El papel de los sindicatos no es resolver el problema de FCC, de sus beneficios empresariales o de sus relaciones con los accionistas, el papel de los sindicatos es lo que ha hecho CCOO en Huesca: defender a los trabajadores. 

Una buena labor la de CCOO que parece va a continuar: la denuncia que pesa por parte de este sindicato sobre la empresa DORNIER apunta a un nuevo éxito sindical.

Quedan pocos días para el 1º de Mayo y volveremos a ver en Huesca, un año más, dos manifestaciones con igual número de participantes.  Si el trabajo de CCOO en Huesca continúa en esta linea es posible que dentro de un año tengamos dos manifestaciones pero ya no estén en la misma UGT y CCOO.